El jamaiquino, de 39 años, se retiró del atletismo en el Mundial de Londres de 2017, tras obtener una medalla de bronce en los 100 metros.
Suena paradójico: lo que ayer nos daba alegrías hoy se ha convertido en nuestro mayor problema. Así le ocurre al jamaiquino Usain St. Leo Bolt, el ocho veces campeón olímpico que a sus 39 años enfrenta problemas de salud que afectan su movilidad.
La vida de este deportista ha sido la inspiración de muchos atletas que sueñan con ser los mejores en su disciplina. Y no es para menos: Bolt fue el ganador de 11 títulos mundiales e inició desde muy joven sorprendiendo al mundo.
En los Juegos Olímpicos de Pekín 2008 obtuvo tres medallas de oro en los 100 metros, 200 metros y 4x100m. Repitió la hazaña en Londres de 2012 y Río de 2016, donde registró marcas históricas como la de 9,58 segundos en 100 metros y 19,19 en 200m, récords que siguen vigentes y lo consagran como el hombre más veloz del mundo.
Pero hoy la situación es distinta: Bolt declaró a la prensa en el Campeonato Mundial de Atletismo que ya no corre debido a una rotura del tendón de Aquiles, por lo que debe mantenerse sereno y guardar reposo en compañía de su familia.
“No, principalmente entreno en el gimnasio. No me encanta, pero creo que ahora que llevo un tiempo sin correr, tengo que empezar a correr de verdad porque cuando subo las escaleras, me quedo sin aliento. Creo que cuando vuelva a entrenar a fondo, probablemente tendré que dar algunas vueltas solo para poder respirar adecuadamente”, explicó a los medios de comunicación de Tokio, Japón.
Además de conquistar al mundo con su velocidad, Usain también cautivó con su sonrisa, carisma y la icónica pose del “Rayo”, aquella que hacía tras ganar las carreras. En la actualidad prefiere la comodidad de su hogar y el amor que le brindan sus hijos.
“Normalmente me despierto justo a tiempo para despedir a los niños rumbo al colegio, y luego depende de lo que tenga que hacer. Si no tengo nada que hacer, simplemente me relajo.
Y añadió: “A veces hago ejercicio si estoy de buen humor. Veo series y me relajo hasta que los niños llegan a casa. Paso tiempo con ellos, paso el rato, hasta que empiezan a molestarme y entonces me voy. Y después, me quedo en casa viendo películas o como ahora me gusta el Lego, juego con Lego”.
El mundo lo vio retirarse en el Mundial de Londres de 2017, donde alcanzó una última medalla de bronce en los 100 metros ante su eterno rival estadounidense Justin Gatlin.
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