La Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian) se la está jugando este año. La tarea de la entidad será clave para superar la crisis fiscal que afronta el Gobierno de Gustavo Petro. Analistas aseguran que la entidad está enfocada en mejorar su eficiencia para cumplir la meta en el recaudo.
En el último año, parte de esa estrategia se ha visto en la reclasificación de propiedades horizontales, que no son otra cosa que los edificios o conjuntos residenciales que comparten ciertas áreas comunes, como pasillos, jardines o ascensores.
La Dian está en la tarea de ponerse al día con la clasificación de estos sitios residenciales, específicamente en los cobros que deben asumir por sus áreas comunes (alquiler de parqueaderos, piscinas, salones comunales, gimnasios, bbq, u otros espacios) y que no vienen haciendo.
Pedro Sarmiento, investigador y docente de la Universidad de los Andes, explicó que estos conjuntos deben pagar IVA —19%— por el arrendamiento de zonas comunes como salones comunales, piscinas o parqueaderos. Algo que se soporta en el artículo 482 del Estatuto Tributario.
¿Se recogió más plata por la reclasificación?
En ese sentido, la Dian informó que solo el año pasado reclasificó 1.200 propiedades horizontales que debían pagar IVA, pero no lo estaban haciendo. Todas ellas, ubicadas en Bogotá.
Gracias a esto, por ejemplo, en el mes terminado el 22 de marzo pasado, el recaudo de IVA por las mencionadas copropiedades en Bogotá fue de $100.295.000.
Solo para tener una idea del impacto de estas medidas, la entidad recibió el año pasado un 152% más de recursos por concepto de IVA de propiedades horizontales reclasificadas, según información suministrada a EL COLOMBIANO
En concreto, el monto obtenido fue de $831,5 millones, mientras que en 2023 había sido de $329,6 millones. Ahora, si se compara con 2022 el aumento es más alto y escala a 219%. (ver infografía).
Sobre ese considerable repunte, la Dian defendió que no se puede “atribuir a una tendencia creciente en el recaudo a dicha reclasificación”. Explicó que obedece “a las actividades que realizaron cada una de las propiedades, en los distintos períodos de generación del tributo”.
Y si bien es cierto que se debe a las actividades, otros analistas interpretan que la Dian está “más pilas” para que no se escape un peso. Solo en el primer trimestre de este año recaudó $599,4 millones por ese concepto. De hecho, ya se adelantó en Bogotá la reclasificación de 80 propiedades horizontales más.
Para el profesor Sarmiento, los conjuntos han sido descuidados al no asesorarse de forma correcta sobre esta normativa, ya que no es algo nuevo.
“La entidad de impuestos tiene la información exógena —reporte tributario— de la propiedad horizontal y allí se puede observar si ha pagado IVA o no, le queda muy fácil hacer los requerimientos”, señaló.
Las cuentas de la Dian
En esta historia es relevante recordar que la Dian espera recaudar 324 billones de pesos este año.
No obstante, analistas han advertido que es probable que esa meta no se cumpla. Julio César Romero, economista jefe de Corficolombiana, sostuvo que el Gobierno tendría que hacer un recorte de $40 billones. Eso porque, en su concepto, el Ejecutivo “pensaba financiarse este año con fuentes de ingresos inciertas”.
Una de ellas, según Romero, es un recaudo superior a $20 billones que se esperan por una mejor eficiencia de la Dian en el recaudo. “Creemos que sí puede aportar más por eficiencia, pero no tan alta”, sentenció el analista.
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Ahora, hay que reconocer que el recaudo ha mejorado frente al año pasado. Por ejemplo, a corte a marzo fue de $72,14 billones, un 6,8% superior frente a los $67,52 billones registrados en el mismo lapso de 2024.
Sin embargo, los resultados arrojados hasta marzo están levemente por debajo de la meta de recaudo propuesta por el Comité Autónomo de la Regla Fiscal —CARF—, porque, para el primer trimestre, tuvieron que haberse recogido $72,2 billones.
¿Cómo está mejorando el recaudo?
Enonces, la Dian parece estar corriendo para tratar de cumplir con los objetivos. Por ejemplo, se cocina una nueva resolución para que los contribuyentes tengan que presentar menos requisitos para la facturación electrónica. Ahora, solo tendrían solicitar el número de la cédula.
Asimismo, hay una polémica porque la entidad le está cobrando a Ecopetrol una deuda por concepto de IVA. Se trata de un saldo pendiente de $9,4 billones por ese impuesto —19%— sobre la importación de gasolina.
Y ni hablar del borrador de decreto que busca modificar las tarifas de retención en la fuente a título de impuestos sobre la renta y complementarios. Con eso, el Gobierno podrá recaudar aún más plata por adelantado por concepto de impuestos que las empresas y contribuyentes deben pagar en 2026.
Para el experto Pedro Sarmiento, este tipo de medidas no necesariamente mejora el recaudo. “Si no hay producción y crecimiento, el contribuyente no tiene cómo pagar”.
En concepto del analista, el mayor problema es la alta informalidad, pues ese tipo de establecimientos no facturan, no declaran renta, no responden por IVA y tampoco practican la retención en la fuente.
Lo cierto es que, para algunos, es muy claro que la dirección de impuestos está buscando “hasta debajo de las piedras” estrategias y fórmulas para cumplir las metas de recaudo para este año y salvar las finanzas estatales.
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