La idea de trabajar solo cuatro días a la semana y descansar tres ya no es una fantasía para los trabajadores colombianos.
La senadora Angélica Lozano, en medio de intensas discusiones con el Gobierno y la oposición, logró que la Comisión Cuarta del Senado aprobara, en tercer debate, la reforma laboral que determina un giro radical en el Código Sustantivo del Trabajo.
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El proyecto establece que la jornada laboral semanal máxima sea de 42 horas, distribuidas en un mínimo de cuatro y un máximo de seis días, siempre que se garantice al menos un día completo de descanso.
La clave es que no habrá reducción de salario, y la ampliación de la jornada diaria no se considerará hora extra, salvo que se trabaje por fuera de los horarios pactados.
Así funcionaría la semana de cuatro días laborales
El articulado aprobado permitiría que trabajadores y empleadores acuerden jornadas más largas durante cuatro días a la semana, compensadas con tres días de descanso consecutivo.
Por ejemplo, si se trabaja de lunes a jueves, el horario diario sería de aproximadamente 10,5 horas, es decir, de 8:00 a.m. a 6:30 p.m. “Esta ampliación no constituye tiempo suplementario o de horas extras”, dice textualmente el artículo 12 del proyecto.
El economista Alejandro Useche, de la Universidad del Rosario, explicó a EL COLOMBIANO que, si bien se trata de jornadas largas, estas siguen siendo legales.
“Con esta propuesta estaríamos ante una extensión significativa, pero dentro de los márgenes que permite la ley laboral colombiana”, afirmó.
Las empresas pioneras: Hada y Decathlon lo hicieron primero
Aunque para muchos esta propuesta suena revolucionaria, hay empresas colombianas que ya la aplican con buenos resultados.
Una de ellas es Grupo Hada, la empresa con sede en Barranquilla, que produce jabones para gigantes como Colgate y Natura. En enero de 2022 lanzaron su programa “Flexiviernes”, con el que instauraron la jornada laboral de cuatro días y tres de descanso, sin tocar un solo peso del salario de sus miles de trabajadores.
“Nos adelantamos al futuro. Trabajamos por resultados, no por horas. Hemos ganado en eficiencia, retención de talento y productividad”, aseguró la Gerencia del grupo.
Según la compañía, desde que tomaron la decisión, Hada creció un 50% en ingresos en 2022, repitió el logro en 2023 y se convirtió en una de las empresas más apetecidas para trabajar en la región.
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Otra empresa que se sumó a esta tendencia fue Decathlon Colombia, filial del grupo francés Mulliez. En enero de 2024, redujeron su jornada laboral de 47 a 40 horas semanales, repartidas en cinco días, sin afectar el salario ni los beneficios de los empleados.
“Es el resultado de nuestra búsqueda continua del bienestar y felicidad del equipo. Hoy somos más productivos y estamos más motivados”, declaró Decathlon Colombia.
En solo seis meses del año pasado, la compañía reportó un 94,4% de productividad y 90% de satisfacción entre sus cientos de empleados. “Tenemos un equipo con más energía, más feliz y menos estresado”, resumió la empresa.
Aunque la ponencia propone este esquema como una alternativa legal, no será obligatorio ni aplicará a todos los sectores. La propia Angélica Lozano ha aclarado que dependerá de la voluntad de cada empresa y de un acuerdo mutuo entre empleador y trabajador.
Eso sí, si se firma el acuerdo, las condiciones deben quedar claras y cualquier trabajo adicional deberá ser reconocido como hora extra.
“Esto no es una camisa de fuerza, es una opción para quienes quieren organizar mejor su tiempo, sin afectar sus ingresos”, dijo la senadora Lozano.
¿Qué dice la ley actual y cómo encaja esta propuesta?
Colombia viene avanzando en la reducción de la jornada laboral gracias a la Ley 2101 de 2021, que establece una disminución progresiva de las 48 horas actuales hasta llegar a 42 horas en julio de 2026. Este año, el 15 de julio, bajará a 44 horas semanales.
La ponencia de Lozano no contradice esa ley, sino que la complementa al permitir nuevos esquemas de distribución de las horas ya establecidas. Lo importante es que no se afecte el pago del trabajador y se garantice un día mínimo de descanso.
Según la OCDE, Colombia sigue teniendo una de las jornadas laborales más largas del mundo. La discusión sobre reducirla y flexibilizarla no es nueva, pero cobra más fuerza con los ejemplos positivos de empresas como Hada y Decathlon.
“Trabajar menos no significa producir menos. Al contrario, el tiempo de calidad, el descanso y el equilibrio vida-trabajo hacen que el talento rinda más y permanezca motivado”, subrayó el Grupo Hada.
Los beneficios no son solo empresariales. También hay impacto en la salud mental, la vida familiar, la educación continua y la productividad del país.
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