Consolidar un gran equipo, ser campeón, ofrecer espectáculo y cimentar una comunidad en torno al baloncesto en Medellín fueron algunos de los objetivos que Daniel Hasan se trazó al instalarse en la ciudad. A año y medio de su llegada, el club Paisas ya cuenta con dos títulos de Liga y el avance a cuartos de final de la Liga de Campeones de América.
El 2025 ha sido el año de la consolidación. Se han cumplido los principales objetivos: ganar títulos, fidelizar la afición, aumentar la comunidad del baloncesto en la ciudad, cumplir con la labor social y elevar la marca Paisas de Medellín a nivel internacional.
En la consecución de estos logros, el técnico venezolano Daniel Seoane ha sido una pieza clave. Bicampeón gracias a su conocimiento, amor por el deporte y exigencia, ha logrado cohesionar un grupo que, más allá de los nombres, ha creado una filosofía de juego donde la importancia reside en el conjunto.
“Este bicampeonato es muy especial y agradezco mucho al grupo de jugadores, a Fernando, a los directivos, a Daniel y Jorge, porque nos han dado todas las herramientas y unos deportistas que lo han dejado todo, consolidando la filosofía de juego en la que todos y cada uno son importantes, porque lo relevante es el equipo”, comentó Seoane.
Esta cohesión se confirma con las cifras extraordinarias de Paisas en la temporada. El equipo se coronó campeón con una racha de 12 triunfos consecutivos, de un total de 15 victorias en la Liga, y solo tres derrotas, todas ellas sufridas en la primera fase de todos contra todos.
Las series de semifinal y final fueron perfectas, pues los antioqueños ganaron ambas por marcadores de 3-0 ante Motilones de Cúcuta y Cimarrones de Chocó.
En la temporada, Paisas convirtió 1.608 puntos y permitió 1.234, logrando una diferencia a favor de 374 cestas, lo que lo destacó como el equipo más efectivo en la ofensiva de la Liga nacional.
Equipo base y la renovación
Aunque el quinteto tuvo algunos ajustes a lo largo de la temporada por rendimiento, la base que logró el bicampeonato estuvo integrada por los norteamericanos Alexander, Brandon Weatherspoon, Marcus y Eric Crawford, junto a los colombianos Luis Almanza, Soren de Luque, José Lozano, David Ojeda, Esneider Mosquera, Léiner Moreno y Luis Benítez.
Hasta semifinales, el equipo también contó con el experimentado antioqueño Juan Diego Tello, quien fue clave en la temporada regular y semifinal, pero no participó en la serie final ante Cimarrones por motivos administrativos.
En este grupo, jugadores como David Ojeda, Esneider Mosquera y Luis Benítez se han consolidado como la renovación de Antioquia, proyectándose como los rookies (novatos) destacados de la temporada.
“Para nosotros no solo es importante tener jugadores nacionales de gran nivel y referentes, sino elegir muy bien los refuerzos extranjeros y desarrollar a los jóvenes que hacen parte del proceso de escuela. La idea no solo es ser campeones y lograr resultados competitivos, sino crear una base de jugadores que puedan trascender y llegar a Selección Colombia o al exterior”, mencionó Jorge Saldarriaga, presidente de Paisas.
Labor social y posicionamiento de la marca
Tras la llegada de Daniel Hasan (dueño de Paisas), el cantante Ryan Castro se vinculó como socio estratégico, y desde entonces el club ha logrado consolidar un plan estratégico en el que se integra el equipo profesional y se han establecido varios campos de acción.
Paisas desarrolla un proyecto deportivo que abarca el espectáculo, la labor social, la comercialización de marca, el posicionamiento del nombre y la creación de afición.
Durante el semestre, los resultados de este modelo fueron evidentes: se registraron más de 15.000 asistentes en el coliseo Iván de Bedout (con boleta comprada) y se concretó la venta de 1.000 jerseys (camisetas de competencia), según datos entregados por Diego Jaramillo, director de mercadeo de Paisas.
Además, el club realizó un campamento deportivo (con la expectativa de hacer dos en 2026, uno por semestre), e intensificó su labor social con una jornada de adopción de mascotas junto a La Perla, la donación de una silla de ruedas a Pablo García (un niño basquetbolista), la integración con el equipo de baloncesto del Inder para personas en condición de discapacidad, la entrega de mercados a madres cabeza de hogar del Barrio París y de la Fundación Mi Gente, y una actividad especial con los niños del Hospital Pablo Tobón Uribe.