De acuerdo con el Observatorio de Desarrollo Económico de Bogotá, el evento tendrá un impacto económico total estimado de $74,6 mil millones de pesos, lo que representa un aumento del 25,9 % frente a la edición 2024.
Se espera la asistencia de cerca de 90.000 personas: 51.600 residentes de Bogotá y 38.400 turistas nacionales e internacionales. Estos últimos impulsarán especialmente la hotelería, con un gasto promedio proyectado de $445.000 en alojamiento.
“Eventos como el Festival Cordillera demuestran que la cultura es un motor de desarrollo económico para Bogotá. No solo atraen a miles de visitantes que consumen en nuestros restaurantes, hoteles y comercios, sino que generan empleo, activan la economía de los barrios y posicionan a la ciudad como un destino cultural de talla mundial”, señaló Pilar Torres Alvarado, subdirectora de Estudios Estratégicos de la Secretaría de Desarrollo Económico.
¿Qué pasó en el primer día del Festival Cordillera?
La apertura estuvo a cargo de los Gipsy Kings junto a André Reyes, que encendieron el escenario Cordillera con su fusión de flamenco, rumba y funk. Miguel Bosé regresó a Bogotá tras varios años de ausencia con un show cargado de clásicos como Morena Mía, Amante Bandido y Te amaré, que fueron coreados por miles de asistentes.
En el escenario Cotopaxi, Crudo Means Raw reapareció después de un largo tiempo fuera de los escenarios con canciones como Hubiera y Esmeraldas, mientras que en Aconcagua UB40, con Ali Campbell al frente, repasó lo mejor de su repertorio reggae.
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Rubén Blades logró una de las mayores convocatorias de la noche en el escenario principal con himnos como Pedro Navaja, Decisiones y Amor y Control, antes de dar paso a Carlos Vives, que cerró con clásicos como La tierra del olvido y Cumbiana, acompañado de fuegos artificiales.
La clausura de la primera jornada estuvo dividida entre Paulo Londra, La 33 y La Mosca. Estos últimos se robaron el protagonismo con su cumbia-rock de estadio y un repertorio que incluyó Muchachos y Para no verte más, además de una colaboración sorpresa con Los Caligaris.