En este contexto, Carlos Vives, acompañado por su banda La Provincia, ofreció una presentación íntima con la que celebró los 30 años de su álbum La Tierra del Olvido, un trabajo que muestra la diversidad cultural y la riqueza musical que han definido su carrera.
Siga leyendo: Un libro hecho en Medellín le cuenta la historia del reguetón desde la evolución del sonido
Grabado en la sede de NPR en Washington D. C., Carlos Vives convirtió el Tiny Desk en una fiesta de sonidos que entrelazan la tradición y la modernidad, momento perfecto para celebrar nuestra herencia hispanoamericana.
Instrumentos tradicionales como la gaita, la flauta e’ millo y el acordeón se fusionaron con guitarras, teclados y percusiones modernas, ofreciendo un viaje musical cargado de identidad, alegría y orgullo.
Durante su presentación, Vives interpretó temas que forman parte de su nuevo álbum ‘La Tierra del Olvido – 30 años (Remastered and Expanded)’, incluyendo La Cachucha Bacana, Diosa Coronada, Ella y Agua.
También, algunos de sus mayores éxitos como La Tierra del Olvido y Pa’ Mayte, con la que originalmente planeaba finalizar la sesión. Sin embargo, la energía del momento y la ovación del público lo llevaron a interpretar un tema más, cerrando con broche de oro con una actuación de su clásico global Fruta Fresca.
Lea aquí: Natalia Lafourcade anunció concierto en Colombia: fechas, boletería y más detalles
En un momento especialmente emotivo del concierto, Vives expresó: “Hace 30 años escribimos este álbum, yo no sabía qué estábamos haciendo realmente. Con el tiempo descubrí que era mi familia, buscando quién soy y encontrando a mi familia. Ese dibujo que ven en el álbum ‘La Tierra del Olvido’, esa es mi familia, ahí está todo lo que somos. Somos españoles, americanos, indígenas, afro... pero además unimos nuestra sangre, entonces es mucho más valioso aún todo lo que somos”.